El 4 de octubre de 2023, la Comisión Europea lanzó una investigación anti-subvenciones sobre la importación de baterías de vehículos eléctricos procedentes de China. Durante esta disputa, España se postuló como mediador en el conflicto entre Europa y China. Esto refleja los intereses nacionales de España, que está intensificando sus relaciones económicas con China más intensamente que la media de la UE. No obstante, tal papel no podría presentar mayor complejidad que en el contexto actual de creciente rivalidad entre EE.UU. y China, de crisis del régimen económico global, especialmente desde el llamado “Día de la Liberación” del Presidente Trump, y de mayor divergencia de posiciones entre los estados de la UE sobre cuál debería ser su política hacia China. En esta encrucijada, el presente artículo discute los beneficios y costes asociados al papel de mediación que España se propuso ejercer entre la UE y China, tomando el caso concreto de la investigación sobre vehículos eléctricos chinos el año pasado. Para ello, se ofrece una perspectiva histórica sobre la política española hacia China, se analiza el rol de España en el conflicto y se pone en perspectiva de los intereses de España hacia China. Ver artículo completo aquí.
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